Si eres deportista seguro que sabes que es tan importante la realización de ejercicio físico como la prevención de posibles lesiones. Pese a que algunas veces las lesiones pueden ser fruto de accidentes, otras pueden prevenirse si son ocasionadas por una mala praxis durante el ejercicio.
Factores a tener en cuenta para prevenir lesiones
Existen muchos tipos de lesiones deportivas tanto musculares como óseas o articulares, pero para evitar todas ellas es necesario que sigas estos consejos básicos:
- Realiza un plan de calentamiento y estiramiento: los ejercicios dependerán del tipo de deporte que vayas a practicar y su intensidad. Con el calentamiento, los músculos se preparan para la actividad física aumentado el flujo de sangre que repercutirá en una mayor resistencia y flexibilidad. Es necesario que le dediques al menos quince minutos a esta fase y que conozcas tus propios límites para evitar lesionarte.
- Empieza con ejercicio aeróbico: te recomendamos que inicies el entrenamiento con un poco de ejercicio suave para aumentar la frecuencia cardíaca y activar el sistema respiratorio.
- Utiliza el equipamiento adecuado: deberás cumplir las normas de vestimenta y calzado en función del deporte que practiques, así como el material reglamentario: cascos, rodilleras, muñequeras y/o coderas.
- Jugar de forma segura: si se trata de un deporte de competición, procura no realizar choques violentos con otros jugadores respetando las reglas y evitando así posibles daños físicos.
- Tómate días libres: los periodos de descanso son necesarios para recuperar el esfuerzo que se ha llevado a cabo con el deporte. Un descanso inadecuado multiplica el riesgo de sufrir lesiones deportivas.
- Lleva a cabo un enfriamiento: consiste en realizar estiramientos y ejercicios de intensidad suave para enfriar los músculos y que vuelvan a su estado natural una vez hayas acabado la actividad deportiva. A este punto también es recomendable dedicarle quince minutos y bajar el ritmo paulatinamente.
- Hazte auto masajes: el masaje deportivo ayuda a proteger nuestros músculos y articulaciones. Si además le aplicas un gel específico ayudarás a mejorar tu rendimiento deportivo ya sea activando la circulación en el pre-entreno o acelerando la recuperación tras el ejercicio.
- Cuida la alimentación y la hidratación: cuando realizamos alguna actividad física es normal perder gran cantidad de líquido, por lo que es necesario beber agua para mantenerse hidratados. Además, una dieta equilibrada que reduzca la ingesta de grasas saturadas y que incluya todos los nutrientes que el cuerpo necesita en su justa medida influirá de manera directa en tu salud y condición física.
Estas pautas contribuirán de manera activa a la prevención de molestas lesiones que, en muchas ocasiones, conllevan largos periodos de recuperación. Recuerda que hacer ejercicio es muy sano pero debemos ser conscientes de los factores de riesgo y los límites de nuestro cuerpo para no sobrepasarnos.
Revisado por: Ana Mª Calero Ubieta, Farmacéutica Col. 21022